Cuando te dedicas al sector de la limpieza nunca sabes a qué material te va a tocar enfrentarte. Aunque es verdad que los objetos de metal, sobre todo en decoración, han ido desapareciendo, un profesional de la limpieza ha de saber su técnica de limpieza. Por eso, en Senesant 2000 te vamos a enseñar cómo se limpian determinados metales.
Empezamos con el bronce, un material que cuando está expuesto mucho tiempo al aire y a la humedad le aparece una capa verdosa conocida como pátina. La pátina, le da a los objetos un aspecto de envejecimiento. Este acabado a muchos les gusta ya que le da un carácter especial al bronce, pero otros prefieren un bronce brillante con un aspecto limpio.
Pasos para su limpieza
- Aclarar con agua tibia los objetos y posteriormente secarlos bien con una toalla limpia. Esto eliminará el polvo y otras partículas.
- Poner en un plato pequeño 2 cucharadas de bicarbonato de sodio.
- Rociar un poco de jugo de limón en el bicarbonato de sodio, y mezclarlo hasta formar una pasta suave.
- Aplicar dicha pasta al artículo de bronce. Te aconsejamos usar guantes de goma para proteger las manos. También puedes utilizar un trapo pequeño para aplicar la pasta.
- Con trapos de algodón, hay que frotarlo mediante pequeños movimientos circulares. Este es el paso más importante para eliminar la capa verdosa. Frota las veces que sea necesario hasta que veas el bronce limpio y brillante. Opcionalmente, y si cuesta mucho limpiarlo, puedes utilizar una nana de limpiar platos.
- Dejar reposar la pasta encima del artículo durante 20 o 30 minutos.
- Pasado este tiempo enjuagar el objeto con agua tibia para quitar la pasta. Seguidamente secarlo con una toalla limpia. Finalmente quedará el bronce brillante y perfecto.
- Si el objeto sigue verdoso repite los pasos del 2 al 7.