El invierno puede ser una temporada desafiante para los jardines. Las temperaturas frías, las heladas y la falta de luz solar pueden afectar tanto a las plantas como al suelo.
Preparar tu jardín para esta estación es esencial para mantenerlo sano y garantizar que vuelva a florecer con fuerza en primavera. Por ello, en este blog de Senesant, te explicamos cómo proteger tu jardín durante el invierno con consejos prácticos y efectivos.
Limpieza general del jardín
El primer paso para preparar tu jardín es realizar una limpieza a fondo. Retira hojas secas, ramas caídas y restos de plantas marchitas. Esto no solo hará que el espacio luzca más ordenado, sino que también evitarás la acumulación de plagas y enfermedades que podrían afectar a tus plantas.
Asegúrate de eliminar cualquier maleza que pueda competir con tus plantas por nutrientes. Además, si tienes flores o plantas anuales que han completado su ciclo, retíralas para evitar que ocupen espacio innecesario.
Protege el suelo con un buen acolchado
El suelo es uno de los elementos más importantes de tu jardín, y protegerlo en invierno es esencial. Aplica una capa de acolchado (como corteza de árbol, hojas trituradas o compost) para aislar las raíces de las plantas y evitar que el frío extremo las dañe.
El acolchado también ayuda a conservar la humedad del suelo y previene la erosión causada por las lluvias invernales.
Poda las plantas correctamente
El invierno es el momento ideal para podar arbustos, árboles y plantas perennes. La poda elimina ramas muertas, fomenta un crecimiento saludable y permite que las plantas conserven energía durante los meses fríos. Sin embargo, asegúrate de investigar las necesidades específicas de cada planta, ya que algunas especies no deben ser podadas en esta época.
Al podar, utiliza herramientas limpias y afiladas para evitar dañar las plantas y reducir el riesgo de infecciones.