Vivir en una comunidad de vecinos implica que muchas personas hagan uso de las mismas dependencias e instalaciones y es normal que a la hora de organizar la limpieza surjan ciertos desacuerdos entre los propietarios de las viviendas. Además, ahora con la llegada del verano muchas comunidades de vecinos ubicadas en zonas costeras o vacacionales pasan a aumentar considerablemente su número de usuarios.

Aplica estos consejos:

Recogida de basuras.

Si cada uno no gestiona bien su propia basura, puede afectar a la salubridad del edificio. Hay que cumplir con los horarios y con sus lugares de depósito. Además, si la basura deja mancha en alguna zona común, lo correcto es limpiarlo inmediatamente después.

El ascensor y las escaleras.

Es responsabilidad de cada vecino y visitante respetar las instalaciones y hacer un correcto uso de ellas. Estos espacios deben mantenerse limpios, sin olor a tabaco, suciedad de algún animal, basura, etc. Además, si algún propietario realiza obras, tiene la responsabilidad de limpiar lo que se haya ensuciado.

Mascotas que viven en el edificio.

Los animales no pueden ir sueltos ni hacer sus necesidades en las zonas comunes. En caso de que así sea, el propietario tiene que limpiar y reparar los desperfectos que esto haya causado.

Zonas comunes.

El continuo tránsito de las entradas, rellanos y pasillos, así como las terrazas y los garajes, hace que su mantenimiento tenga que ser continuo. Lo mejor es buscar el consenso y la colaboración de la mayor parte de vecinos. Con disposición, se pueden crear unos buenos hábitos de limpieza y mantenimiento.

Para quitarse de problemas, nuestra recomendación es contratar una empresa especializada en la limpieza de comunidades de vecinos.

En Senesant 2000 estamos a tu entera disposición. Prestamos nuestros servicios de limpieza desde Sant Joan Despí a Barcelona.